Eva María Rosa Martínez y David Martínez Rubio
Facultad de Psicología, Magisterio y Ciencias de la Educación, Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir”, España
En los últimos años estamos viviendo una auténtica revolución de la comunicación digital y de sus elementos más singulares: los emojis (ideogramas o pictogramas) y sus antecesores, los emoticonos (combinaciones de signos de puntuación que representan caras con distintas expresiones o emociones). Estos iconos, permiten transmitir e identificar emociones sin el uso de palabras, al mismo tiempo que enriquecen la comunicación y reducen la ambigüedad de la información, mejorando nuestras interacciones digitales. Además, diversos estudios demuestran que nuestro cerebro reacciona ante estos iconos, en algunos aspectos, de manera muy parecida a como lo hace con los rostros.