Ángel Correa
Dept. de Psicología Experimental y Fisiología del Comportamiento, Universidad de Granada, España
COLAMN («Una novedosa arquitectura de procesamiento para sistemas cognitivos basada en la microcircuitería laminar del neocórtex») es un macroproyecto dentro del Reino Unido que intenta implementar en silicio la corteza cerebral de mamíferos. Este sistema sería capaz de realizar multitud de operaciones complejas que los ordenadores convencionales no son capaces de hacer. En este proyecto están implicados científicos cognitivos de diversas áreas, como la ingeniería, matemáticas, biología o informática.

Granada acogerá a los distinguidos científicos Maurizio Corbetta (Universidad de Washington, EEUU), Juan Botella (Universidad Autónoma de Madrid, España) y Nick Yeung (Universidad de Oxford, Reino Unido), en el marco de la 7ª Reunión Científica sobre Atención.
La paradoja de los cuervos negros de Hempel nos lleva a pensar que en la mente humana, además de la lógica, intervienen otras variables. Este problema también pone de relieve que lo lógico no siempre coincide con lo más sencillo, lo más rápido o lo más eficaz. No obstante, los supuestos teóricos de la teoría de la relevancia de Sperber y Wilson pueden aportar una posible solución a esta paradoja.
La incorporación de información falsa en la memoria de un suceso delictivo puede alterar el subsiguiente testimonio. Para estudiar la aceptación de tres tipos diferentes de información falsa se realizaron tres experimentos aplicando el paradigma de la información engañosa. Los resultados señalan que los detalles (vs. acciones), los contenidos periféricos (vs. centrales) y la información de tipicidad alta (vs. baja) se aceptan con mayor facilidad.
Ponemos un especial interés en expresarnos con palabras, pero olvidamos que, en ocasiones, nuestras emociones, nuestra cara e incluso una simple mirada pueden ser más precisas que la más detallada de las explicaciones. Recientes investigaciones van más allá, y señalan que nuestras preferencias, deseos y prejuicios pueden estar influidos por la mirada y las expresiones faciales emocionales que observamos en los demás.