Javier Valenzuela
Dept. de Filología Inglesa, Universidad de Murcia, España
¿Puede afectar el lenguaje que hablamos al modo en que procesamos la música? En este artículo se revisa un experimento reciente que parece respaldar esta idea, y que señala la alta correlación existente entre la capacidad conocida como «oído absoluto» (i.e., la capacidad de identificar una nota musical sin ninguna otra referencia) y el ser hablante de lenguas tonales (i.e., aquéllas en las que el significado léxico varía según la entonación).

Las nuevas tecnologías de la información y de las comunicaciones ofrecen la posibilidad de que las personas cooperen para generar y compartir conocimiento utilizando el lenguaje natural como herramienta de comunicación.
¿Cómo somos las personas capaces de pensar sobre cosas que jamás hemos podido ver o tocar? La ciencia está llena de conceptos e ideas abstractas como por ejemplo campo electromagnético. Pero también la vida cotidiana está plagada de conceptos sin un referente tangible, como justicia, amor o, como en el caso que nos ocupa en este artículo, la idea de tiempo. Exponemos aquí algunas de las estrategias que utiliza nuestro cerebro para poder entender, manipular, y sentir algo que, de forma racional, no deja de ser un constructo con la etiqueta «tiempo».