Klara Hemmerich (a), Fernando G. Luna (b), Juan Lupiáñez (a) y Elisa Martín-Arévalo (a)
(a) Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento, Universidad de Granada, España
(b) Instituto de Investigaciones Psicológicas (IIPsi), CONICET-UNC, Universidad Nacional de Córdoba, Argentina

(cc) Klara Hemmerich.
Existe evidencia de que en tiempos tan remotos como la antigüedad greco-romana se colocaban peces con propiedades eléctricas sobre la cabeza de personas con el fin de aliviar ciertas dolencias, como la migraña o alteraciones del estado anímico. Desde entonces el empleo de la corriente eléctrica para tratar estados patológicos o deficiencias se ha refinado progresivamente hasta el desarrollo de una técnica protocolizada, segura y eficaz, para modular el funcionamiento cerebral. Aquí abordamos los principios básicos de la estimulación eléctrica transcraneal y su uso en la modulación de procesos cognitivos tan relevantes como la atención.